CAPÍTULO 3: EL PRIMER ENCUENTRO
Los años pasaban y los supervivientes de las guerras pasadas seguíamos escondidos en la cara oculta de La Luna. Todo eso cambió un tal día 20 de Julio de 1969, una nave bastante antigua en comparación con las nuestras aterrizó en la superficie lunar. No sabíamos de que se trataba pero vista su tecnología era evidente que no corríamos peligro. Dejar claro que nuestra única intención era conseguir un buen trato con esa desconocida especie, somos muy hospitalarios. Pasaron las horas y de repente una compuerta de la nave se abrió, pudiendo apreciarse una especie de monstruo blanco cabezudo. Bajaron de la nave, pisando la superficie lunar e intentando no asustarles nos acercamos para mantener nuestro primer contacto con otra especie. Sus reacciones fueron un poco sorprendentes, a pesar de que alucinaban al vernos tuvieron una actitud inofensiva ya que sabían que algo podían encontrarse. Entonces le dije:
- nsakl vnfnv dufufr (Hola, soy un reptiliano, ¿como te llamas?)
A lo que ellos contestaron:
- Hola, ni puta idea de lo que dices pero somos Armstrong y Aldrin y venimos en el Apolo 11.
Tras varios minutos de charla sin sentido pudimos comunicarnos, ya que los reptilianos poseemos un sistema de aprendizaje super avanzado pudiendo aprender idiomas en minutos. Cuando conseguimos entendernos les invitamos a un café con tortas en nuestros aposentos.
La segunda parte de nuestra primera reunión con los humanos la tendréis en el siguiente capítulos, NO OS LO PERDÁIS!!!! SALSEO ASEGURADO.
Los años pasaban y los supervivientes de las guerras pasadas seguíamos escondidos en la cara oculta de La Luna. Todo eso cambió un tal día 20 de Julio de 1969, una nave bastante antigua en comparación con las nuestras aterrizó en la superficie lunar. No sabíamos de que se trataba pero vista su tecnología era evidente que no corríamos peligro. Dejar claro que nuestra única intención era conseguir un buen trato con esa desconocida especie, somos muy hospitalarios. Pasaron las horas y de repente una compuerta de la nave se abrió, pudiendo apreciarse una especie de monstruo blanco cabezudo. Bajaron de la nave, pisando la superficie lunar e intentando no asustarles nos acercamos para mantener nuestro primer contacto con otra especie. Sus reacciones fueron un poco sorprendentes, a pesar de que alucinaban al vernos tuvieron una actitud inofensiva ya que sabían que algo podían encontrarse. Entonces le dije:
- nsakl vnfnv dufufr (Hola, soy un reptiliano, ¿como te llamas?)
A lo que ellos contestaron:
- Hola, ni puta idea de lo que dices pero somos Armstrong y Aldrin y venimos en el Apolo 11.
Tras varios minutos de charla sin sentido pudimos comunicarnos, ya que los reptilianos poseemos un sistema de aprendizaje super avanzado pudiendo aprender idiomas en minutos. Cuando conseguimos entendernos les invitamos a un café con tortas en nuestros aposentos.
La segunda parte de nuestra primera reunión con los humanos la tendréis en el siguiente capítulos, NO OS LO PERDÁIS!!!! SALSEO ASEGURADO.
Pene
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ResponderEliminarHola amigos reptilianos, es una emoción enorme para los reptilianos que vivimos reprimidos en nuestros trajes de simulación de humanos el saber que ya algunos de nuestros compatriotas se atreven a salir del armario humano en el que vivimos la mayoría, ya es hora de que sepan de nuestra nddjxbs (puta en reptiliano) existencia. Muchas gracias y a vivir como reptil.
ResponderEliminarMi verdadero nombre es Xwtñpaa Oeuiauxth
hombre Xwtñpaa Oeuiauxth me alegro verte por aqui. A ver si nos vamos a ver unas cuantas nddjxbs juntos.
EliminarUn ksjkdio (pollazo en reptiliano) en la frente con mucho amor de hjduif hggheuh
Un saludo reptiliano
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